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Los pobres huelen a risa. La Sexta Noticias
La compañía de teatro andaluza “Los Ulen” llega a Madrid con la reedición de “Maná Maná”, una comedia sobre el día a día de los sintecho en nuestro país.
Pepe Quero, Maite Sandoval y Paco Tous vuelven al teatro, de donde, por otra parte, nunca se han ido, con la reedición de uno de sus montajes más aplaudidos y premiados, “Maná Maná (una crónica de parias)”, que estrenaron en 1996 y mantuvieron durante cinco años en cartel viajando por toda España y Latinoamérica.
La compañía andaluza, que cumplía hace poco sus 23 años sobre las tablas del escenario, decidía hace unos años reeditar esta exitosa comedia. Mismo argumento, pero circunstancias muy diferentes. Sin cambios en la estética, pero con mucha mayor dureza que en la versión original. Y es que la ficción de aquél entonces se ha visto drásticamente superada por la realidad actual. Casualidades del destino, vuelven a hablar de la pobreza, y hacen en plena crisis. Humor balsámico para tiempos difíciles.
“Maná Maná (el regreso)” pretende dar voz a quienes nunca la han tenido, pero siempre han estado ahí. En las calles, sin más techo que una caja de cartón. Pobres que, según dicen, se han convertido en “toda una clase social”. Bajo esta premisa, no sólo dan voz sino que se cuestionan las preguntas que nadie se hace. ¿Cómo se quieren los pobres? ¿Por qué se pelean? ¿Qué valoran y cuáles son sus inquietudes? ¿Viven el día a día o hacen planes de futuro? Y, sobre todo, ¿cómo rellenan las horas de cada largísimo día en la calle?
Y lo hacen con la misma línea cómica y dramática propia de los Ulen, trabajada montaje tras montaje durante 23 años. Comedia oscura. Humor negro. El efecto no es otro que el de la risa, casi balsámica insisto, que brota de las más crudas situaciones.
Ayer fue el estreno en Madrid, en el Teatro de Lara, escenario al que subirán hasta el próximo 31 de mayo, y los asistentes abandonaban el patio de butacas con la sensación de haber asistido a todo un drama social y haber respondido con risas y carcajadas incontenibles. Es el humor que Quero, Sandoval y llevan a todos sus trabajos. Que la gente salga del teatro pensando ¿cómo puedo reírme tanto de algo tan dramático?
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