Maná, Maná (El Regreso) en el Teatro Bergidum

Maná, Maná (El Regreso) en el Teatro Bergidum. Los Ulen nos volverán a dar lo mejor de sí mismos. Se trata de una divertidísima reflexión sobre la pobreza, pretexto escogido por los autores para destapar sobre el escenario el tarro de sus esencias. En unos tiempos en que desde la TV se manipula al público anónimo con un humor chabacano, programado y aplaudido mecánicamente desde la alienación, frente a esa situación efímera, se abren otros caminos que permanecen. Y Los Ulen son uno de esos caminos. Maná, Maná en Ponferrada. Viernes 23 de Octubre. Compra tu entrada para Mana, Maná

Maná Maná es un espectáculo divertidísimo y desgarrador. Los Ulen llaman con campanadas divertidas al sentimiento de culpa, nos desternillan y, aunque nada cambie, cambia al menos la sensación de asistir a un espectáculo completo, ingenioso y útil.

Los Ulen sonríen y nosotros sonreímos con ellos, ellos cantan y nosotros cantamos con ellos. Ellos aplauden y nosotros aplaudimos agradecidos por el breve momento de farsa, de alegría y de fiesta que quedará en nuestra memoria.

El texto permite que los solos y las intervenciones en grupo fluctúen sin altibajos, teniendo como principal ingrediente el gran nivel de interpretación. A través de una sucesión de cuadros de contenidos casi independientes se pasa revista a una rica y extensa variedad de aspectos de la vida, que constituyen la experiencia de unos protagonistas que podrían definirse como pobres inmortales, casi arquetípicos.

Mayte Sandoval, Paco Tous y Pepe Quero encarnan a unos marginados que no pretenden actuar como payasos, sino mostrar las carencias que soportan los abandonados por la injusta sociedad. Pero como ellos son los Ulen y los Ulen son así y no pueden ser de otra manera, la denuncia la hacen de la manera más pura y cruel, mediante el sarcasmo de la caricatura.

Maná Maná es un espectáculo divertidísimo y desgarrador. Los Ulen llaman con campanadas divertidas al sentimiento de culpa, nos desternillan y, aunque nada cambie, cambia al menos la sensación de asistir a un espectáculo completo, ingenioso y útil.

Los Ulen sonríen y nosotros sonreímos con ellos, ellos cantan y nosotros cantamos con ellos. Ellos aplauden y nosotros aplaudimos agradecidos por el breve momento de farsa, de alegría y de fiesta que quedará en nuestra memoria.

El texto permite que los solos y las intervenciones en grupo fluctúen sin altibajos, teniendo como principal ingrediente el gran nivel de interpretación. A través de una sucesión de cuadros de contenidos casi independientes se pasa revista a una rica y extensa variedad de aspectos de la vida, que constituyen la experiencia de unos protagonistas que podrían definirse como pobres inmortales, casi arquetípicos.

Mayte Sandoval, Paco Tous y Pepe Quero encarnan a unos marginados que no pretenden actuar como payasos, sino mostrar las carencias que soportan los abandonados por la injusta sociedad. Pero como ellos son los Ulen y los Ulen son así y no pueden ser de otra manera, la denuncia la hacen de la manera más pura y cruel, mediante el sarcasmo de la caricatura.

Fuente: laguiago.com